No te dejes llevar solamente por la oferta económica. Evalúa si la empresa tiene lo que buscas para enriquecer tu perfil profesional.
Un buen sueldo y el pago de beneficios completos pueden ser muy atractivos a la hora de evaluar o aceptar una oferta de trabajo, pero no es lo más importante.
Considere otras opciones, como los intereses y los objetivos profesionales que persigue y el desarrollo profesional que espera lograr.
El portal Trabajando.com. elaboró las siguientes recomendaciones que pueden ayudarle a definir sus expectativas:
1. Conozca a su futuro empleador. Infórmese sobre la empresa a la que postula, pregunte si ofrecen planes de carrera o de capacitación.
2. Proyéctese. A veces se deben sacrificar los gastos actuales si eso lo conduce a enriquecer su currículum.
3. Plaza laboral. Investigue cómo está posicionada su profesión en el mercado laboral. Identifique el rango de remuneraciones y las oportunidades en diversos rubros.
4. Funciones y beneficios. Debe tener claro cuáles serán sus funciones y horarios. Negocie con mucha claridad su sueldo antes de firmar el contrato.
5. Sea responsable. Si una oferta no cumple con sus expectativas o piensa que no le conviene, es recomendable rechazarla. Aceptar un trabajo es una responsabilidad, y no es aconsejable renunciar a los dos meses.
FIJARSE METAS
Rosario Almenara, vicepresidente de LHH-DBM Perú, firma especializada en la gestión de talentos, refiere que los aspectos personales deben estar alineados con la parte profesional.
“Toda persona debe fijarse metas laborales específicas de corto plazo (seis meses) y de largo plazo (cuatro años)”, sostiene.
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