Where's Waldo?

Voy a tratar de ser lo más concreta del mundo. No soporto la idea del engaño. No comprendo, ni acepto, ni perdono las mentiras. Es un insulto, jamás un halago. Y sin embargo, se convierten en parte de la vida diaria de tantas personas. Yo no quiero que hagan parte de la mía. No quiero saberlas en mi vida. Quisiera que quien decida ser mi amigo, mi compañero, mi aliado, mi socio o simplemente mi confidente tenga el suficiente carácter para reconocer que conmigo la verdad siempre es el camino a seguir. La honestidad, la sinceridad, una política interna de honestidad brutal. Porque no tiene nada de malo errar, no tiene nada de malo que la verdad sea diferente a lo que esperamos escuchar.

Supongo que con una política de este estilo lo más lógico es acompañarla de otra de agradecimiento y reconocimiento. Pues si, por mucho qu eme duela la verdad que arrojen en mi cara, admiraré y apreciaré y estaré agradecida por haberlo hecho a pesar de no ser la conducta normal de una sociedad cobarde e hipócrita. Ser diferente vale la pena. La diversidad es crucial. El pensamiento divergente y hasta aquellos que son dementes. Nos cuestan, cobran un impuesto a la sociedad. Pero.. sin ellos, que aburrida sería la vida. Que poca evolución habría. Y yo me quedaría sin políticas.

Por eso voy por el mundo, como Noé, como una vela, como una imitación de un Sol, buscando en un mar de gente un Waldo, un ejemplo de honor.



http://acerorojo.blogspot.com/2009/12/wheres-waldo.html