Yo pensaba que a finales de año empezaríamos a salir de la crisis en España y sigo pensando lo mismo. Mi duda ahora es de qué año.
Para salir de una crisis lo fundamental es llamar a tu ejército y decirles de viva voz cuáles son sus deberes, dejar de un lado sus derechos (salvo los elementales, se entiende) y salir a pelear. Sin embargo, nuestro Gobierno se ha dedicado durante todo este tiempo a blindar los derechos de la gente para afianzar los suyos vía subvención y tirando de la visa del país. Ahora todos estamos plenos de derechos pero nadie sabe quién los va a pagar.
Paradoja: para ser más libre y tener tus derechos en forma, primero hay que afrontar los deberes, es decir, arrimar el hombro. Ésto no da votos si la sociedad es imbécil, es la pena.
Nadie dice nada, todos tienen sus subvenciones y ayudas al día: los sindicatos, los desempleados, los funcionarios, los políticos, asociaciones, amigos del flautín, los bancos, las cajas...Y nadie se cuestiona si hay dinero para todos, si es sostenible, si nos lo podemos permitir. Miramos para otro lado y que salga el sol por donde quiera.
Pero, ¿qué va a pasar cuando no haya para pagar a todos el banquete o alguien piensa que esta situación puede durar mucho más?
Ha habido países que han subido los impuestos para coger músculo y que ahora los están bajando. Necesitaban dinero para parar la hemorragia, racionalizar la situación e invertir en el futuro. La diferencia con España es que aquí se suben los impuestos para que no te hagan huelgas generales, no salgan los funcionarios a las calles, no se subleven los parados. Y de invertir en futuro y soluciones nada, que se coma el marrón el que llegue.
Somos una sociedad egoísta, obesa, que no vemos más allá de nuestras narices, que pensamos que somos la leche y que no nos damos cuenta lo paletos que somos, y encima nos hace gracia.
-Bueno, es que en España se vive...
-¿Hace cuánto que no viajas, majo?
Además nos hemos acostumbrado a una clase política mediocre y nos parece natural, creemos que debe ser así. Pues no, hay gente que tiene soluciones, que tiene la cabeza bien amueblada, que sería capaz de resolver la situación, lo que ocurre es que no tienen espacio en nuestro sistema político porque es muy malo, se basa en el arte de manipular no en la virtud de liderar.
En España antes teníamos una crisis: la global. Luego dos: la global y la inmobiliaria. Y ahora tenemos tres: la global, la inmobiliaria y la política. ¡Qué cristo!
http://www.clubdelpensamientocreativo.com/2009/10/tres-en-una.html
Para salir de una crisis lo fundamental es llamar a tu ejército y decirles de viva voz cuáles son sus deberes, dejar de un lado sus derechos (salvo los elementales, se entiende) y salir a pelear. Sin embargo, nuestro Gobierno se ha dedicado durante todo este tiempo a blindar los derechos de la gente para afianzar los suyos vía subvención y tirando de la visa del país. Ahora todos estamos plenos de derechos pero nadie sabe quién los va a pagar.
Paradoja: para ser más libre y tener tus derechos en forma, primero hay que afrontar los deberes, es decir, arrimar el hombro. Ésto no da votos si la sociedad es imbécil, es la pena.
Nadie dice nada, todos tienen sus subvenciones y ayudas al día: los sindicatos, los desempleados, los funcionarios, los políticos, asociaciones, amigos del flautín, los bancos, las cajas...Y nadie se cuestiona si hay dinero para todos, si es sostenible, si nos lo podemos permitir. Miramos para otro lado y que salga el sol por donde quiera.
Pero, ¿qué va a pasar cuando no haya para pagar a todos el banquete o alguien piensa que esta situación puede durar mucho más?
Ha habido países que han subido los impuestos para coger músculo y que ahora los están bajando. Necesitaban dinero para parar la hemorragia, racionalizar la situación e invertir en el futuro. La diferencia con España es que aquí se suben los impuestos para que no te hagan huelgas generales, no salgan los funcionarios a las calles, no se subleven los parados. Y de invertir en futuro y soluciones nada, que se coma el marrón el que llegue.
Somos una sociedad egoísta, obesa, que no vemos más allá de nuestras narices, que pensamos que somos la leche y que no nos damos cuenta lo paletos que somos, y encima nos hace gracia.
-Bueno, es que en España se vive...
-¿Hace cuánto que no viajas, majo?
Además nos hemos acostumbrado a una clase política mediocre y nos parece natural, creemos que debe ser así. Pues no, hay gente que tiene soluciones, que tiene la cabeza bien amueblada, que sería capaz de resolver la situación, lo que ocurre es que no tienen espacio en nuestro sistema político porque es muy malo, se basa en el arte de manipular no en la virtud de liderar.
En España antes teníamos una crisis: la global. Luego dos: la global y la inmobiliaria. Y ahora tenemos tres: la global, la inmobiliaria y la política. ¡Qué cristo!
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