UN CUENTO (PENSADO LATERALMENTE)
ÉRASE UNA VEZ UNA VEZ, UN MAHARAJÁ QUE VIVÍA EN UNA REGIÓN DE LA INDIA
ÉRASE UNA VEZ UNA VEZ, UN MAHARAJÁ QUE VIVÍA EN UNA REGIÓN DE LA INDIA...
El maharajá que regía una gran región tenía una única hija, la cual era la niña de sus ojos. Y tal era así, que lo que la hija del maharajá pedía, a la hija del maharajá se le concedía. Por muy difícil que pareciera, por muy imposible que fuera, lo que la hija del maharajá quería la hija del maharajá tenía.
Un día estando de visita por la región, la hija le dijo a su padre, el maharajá, que había decidido casarse. El padre conociendo a su hija le comentó que le parecía muy bien puesto que ya tenía una edad de las denominadas edad de merecer.
Pero que no estaría de más, que le informara quién había sido el afortunado mortal en quién la joven había depositado sus bellos ojos y su corazón.
La hija atendiendo a la petición del padre, dijo: “Mi amado es el paria de los parias, el último miembro de la última casta de esta Tú región”.
El maharajá al escuchar esto, pensó: con la cantidad de súbditos que tengo y mi hija tiene que elegir al último de los miembros de la última de las castas de esta mí región…..
Ante lo cual el maharajá dijo a su hija: ¿No te parece que la decisión que has tomado es una decisión muy importante?. ¿No crees necesario someterlo al JUICIO DIVINO?.
“¿El juicio divino...?” preguntó la hija.
Si, mira, le dijo el padre, a orillas del Río Sagrado le será ofrecida a tú amado una bolsa de cuero que contiene una piedra blanca y otra piedra negra, ambas del río sagrado. Él, introduciendo una de sus manos sacará una de las piedras. Si saca la piedra blanca será designio de los Dioses que se case contigo, pero si saca la piedra negra será asimismo designio de los dioses que no se case contigo.
A la hija le pareció justo el JUICIO DIVINO, que su padre le proponía.
Pero el maharajá, que por algo era maharajá, decidió que en la bolsa que le fuera ofrecida al joven, a orillas del Río Sagrado, no hubiera una piedra blanca y otra negra. Si no DOS PIEDRAS NEGRAS.
Nuestro pensamiento LÓGICO, nos dice que es imposible sacar UNA PIEDRA BLANCA, lo que posibilitara que la princesa se casase con su amado, de una bolsa que contiene DOS PIEDRAS NEGRAS. Pero esto es un cuento CLÁSICO y como todos debe tener un final feliz.
A orillas del Río Sagrado, al joven amado le fue ofrecida la bolsa que contenía las DOS PIEDRAS....
Cuando al ir a extraer la piedra, al joven, esta se le cayó al Río, todos los presentes empezaron a porfiar y jurar sobre el color de la piedra que habían visto caer.
Los parientes del maharajá, juraban y perjuraban que la piedra que ellos habían visto caer era NEGRA como el carbón. Los parientes del joven juraban y perjuraban que la piedra que ellos habían visto caer era BLANCA como la nieve...
Así continuo la disputa, hasta que el joven dijo: Yo sé que es imposible diferenciar una piedra sagrada que lleva en el Río Sagrado desde la noche de los tiempos de otra que acaba de llegar.... Pero yo, sí os puedo decir el color de la PIEDRA que yo he elegido.
¡¡¡¡Hombre tú, como no vas a saber el color de la piedra!!!!!,
decían con mucho enfado los parientes del maharajá
Mas el joven les tranquilizó. Mirar, si la PIEDRA que yo he sacado es la PIEDRA NEGRA, y por lo tanto no mereceré casarme con la hija del maharajá, es porque dentro de la bolsa quedará la BLANCA y si he sacado la PIEDRA BLANCA, siendo designio de los Dioses que me case con mi amada, dentro de la bolsa quedará la NEGRA.
Miraron dentro de la bolsa y proclamaron que había sacado la PIEDRA BLANCA, pues encontraron la piedra NEGRA dentro de la bolsa.
El maharajá se rindió ante el ingenio del joven y aceptó que este se casará con la niña de sus ojos.
MORALEJA
Nuestro PENSAMIENTO LÓGICO, nos decía que era imposible sacar una piedra blanca de una bolsa que contenía dos piedras negras, pero haciendo algo NO LÓGICO, como dejar caer la piedra al extraerla, Una situación totalmente desfavorable, se convierte en favorable, sin más que utilizar un pensamiento NO LÓGICO, el pensamiento LATERAL.
http://jardinsecretofm.blogspot.com/2010/03/un-cuento-pensado-lateralmente.html
ÉRASE UNA VEZ UNA VEZ, UN MAHARAJÁ QUE VIVÍA EN UNA REGIÓN DE LA INDIA
ÉRASE UNA VEZ UNA VEZ, UN MAHARAJÁ QUE VIVÍA EN UNA REGIÓN DE LA INDIA...
El maharajá que regía una gran región tenía una única hija, la cual era la niña de sus ojos. Y tal era así, que lo que la hija del maharajá pedía, a la hija del maharajá se le concedía. Por muy difícil que pareciera, por muy imposible que fuera, lo que la hija del maharajá quería la hija del maharajá tenía.
Un día estando de visita por la región, la hija le dijo a su padre, el maharajá, que había decidido casarse. El padre conociendo a su hija le comentó que le parecía muy bien puesto que ya tenía una edad de las denominadas edad de merecer.
Pero que no estaría de más, que le informara quién había sido el afortunado mortal en quién la joven había depositado sus bellos ojos y su corazón.
La hija atendiendo a la petición del padre, dijo: “Mi amado es el paria de los parias, el último miembro de la última casta de esta Tú región”.
El maharajá al escuchar esto, pensó: con la cantidad de súbditos que tengo y mi hija tiene que elegir al último de los miembros de la última de las castas de esta mí región…..
Ante lo cual el maharajá dijo a su hija: ¿No te parece que la decisión que has tomado es una decisión muy importante?. ¿No crees necesario someterlo al JUICIO DIVINO?.
“¿El juicio divino...?” preguntó la hija.
Si, mira, le dijo el padre, a orillas del Río Sagrado le será ofrecida a tú amado una bolsa de cuero que contiene una piedra blanca y otra piedra negra, ambas del río sagrado. Él, introduciendo una de sus manos sacará una de las piedras. Si saca la piedra blanca será designio de los Dioses que se case contigo, pero si saca la piedra negra será asimismo designio de los dioses que no se case contigo.
A la hija le pareció justo el JUICIO DIVINO, que su padre le proponía.
Pero el maharajá, que por algo era maharajá, decidió que en la bolsa que le fuera ofrecida al joven, a orillas del Río Sagrado, no hubiera una piedra blanca y otra negra. Si no DOS PIEDRAS NEGRAS.
Nuestro pensamiento LÓGICO, nos dice que es imposible sacar UNA PIEDRA BLANCA, lo que posibilitara que la princesa se casase con su amado, de una bolsa que contiene DOS PIEDRAS NEGRAS. Pero esto es un cuento CLÁSICO y como todos debe tener un final feliz.
A orillas del Río Sagrado, al joven amado le fue ofrecida la bolsa que contenía las DOS PIEDRAS....
Cuando al ir a extraer la piedra, al joven, esta se le cayó al Río, todos los presentes empezaron a porfiar y jurar sobre el color de la piedra que habían visto caer.
Los parientes del maharajá, juraban y perjuraban que la piedra que ellos habían visto caer era NEGRA como el carbón. Los parientes del joven juraban y perjuraban que la piedra que ellos habían visto caer era BLANCA como la nieve...
Así continuo la disputa, hasta que el joven dijo: Yo sé que es imposible diferenciar una piedra sagrada que lleva en el Río Sagrado desde la noche de los tiempos de otra que acaba de llegar.... Pero yo, sí os puedo decir el color de la PIEDRA que yo he elegido.
¡¡¡¡Hombre tú, como no vas a saber el color de la piedra!!!!!,
decían con mucho enfado los parientes del maharajá
Mas el joven les tranquilizó. Mirar, si la PIEDRA que yo he sacado es la PIEDRA NEGRA, y por lo tanto no mereceré casarme con la hija del maharajá, es porque dentro de la bolsa quedará la BLANCA y si he sacado la PIEDRA BLANCA, siendo designio de los Dioses que me case con mi amada, dentro de la bolsa quedará la NEGRA.
Miraron dentro de la bolsa y proclamaron que había sacado la PIEDRA BLANCA, pues encontraron la piedra NEGRA dentro de la bolsa.
El maharajá se rindió ante el ingenio del joven y aceptó que este se casará con la niña de sus ojos.
MORALEJA
Nuestro PENSAMIENTO LÓGICO, nos decía que era imposible sacar una piedra blanca de una bolsa que contenía dos piedras negras, pero haciendo algo NO LÓGICO, como dejar caer la piedra al extraerla, Una situación totalmente desfavorable, se convierte en favorable, sin más que utilizar un pensamiento NO LÓGICO, el pensamiento LATERAL.
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